Planificación semanal: ¿cómo hacer de esto un ritual que ames?

Para lograr sostener en el tiempo la intención (y acción) de planificar semanalmente nuestras actividades en función de nuestros planes y objetivos del mes, es importante que tomemos conciencia de que debemos incorporar un hábito. Y los hábitos se construyen. La pregunta es, ¿qué podemos hacer para incorporar este hábito en particular?

Es que justamente será el hábito de sentarse a planificar cada cierto tiempo el que te va a permitir (y asegurar) de que planificarás con frecuencia, quiero decir, que lo harás de forma regular. La frecuencia necesaria que vos definas para que puedas revisar, actualizar, ajustar y retomar el camino pensado (para salvarte de los desvíos que puedan ir surgiendo).

PARA QUE EL HÁBITO SE AFIRME Y GANE UN ESPACIO EN TU RUTINA, PODES HACER DOS COSAS: O TOMÁRTELO COMO UNA OBLIGACIÓN ABURRIDA O PLANTEÁRTELO COMO UN MOMENTO DE DISFRUTE. QUIZÁS UNA TE FUNCIONE MÁS QUE OTRA, PERO MI RECOMENDACIÓN ES QUE OPTES POR LA SEGUNDA OPCIÓN. PARA QUE REALMENTE PUEDAS SOSTENER EL HÁBITO DE PLANIFICAR CADA SEMANA Y NO LO TERMINES ABANDONANDO CON EL PASO DEL TIEMPO.

Hablo de desear el momento de sentarte a planificar. Y para eso tenes que disfrutarlo. Hoy quiero compartirte unos consejos para que hagas de la planificación semanal de tus actividades y tareas, un ritual de disfrute que esperes con ansias cada semana, al definirlo como momento intimo que está pura y exclusivamente dedicado a vos:

1. Elegir el momento indicado: un día de la semana en un horario que sepas que vas a poder desconectar y tomarte unos minutos para vos. La planificación requiere de concentración y por eso tenés que asegurarte de que el momento que definas para hacerlo tengas toda tu energía disponible. Por ejemplo, a mí me gusta planificar los viernes a la noche, cuando ya terminó mi semana. Ahí planifico todo lo que voy a hacer la semana que está por empezar, en función de mis objetivos del mes. Elijo el viernes a esa hora porque vengo enganchada con todo el trabajo que hice esa semana, lo que me sirve para pensar lo que tengo que hacer en la entrante. No me gusta planificar los domingos porque no me siento con las ganas suficientes de ponerme a pensar (jeje) pero quizás a vos  te funcione planificar ese día o quizás el lunes por la mañana, pero lo ideal es siempre planificar la semana antes de que arranque, obvio.
2. Elegir el lugar: pensá en un lugar donde no tengas distracciones, libre de ruidos molestos y ordenado. Bien iluminado, visualmente agradable y reconfortante (que te guste a vos!): donde estés cómoda. En el que tengas espacio para abrir tus cuadernos, tus calendarios y agenda. Donde puedas desplegar todo lo que necesites para sentirte a gusto y empezar.
3. Elegir papelería que te motive e inspire (y si te guía, mejor): Usar papelería que te guste es importante para darle una motivación adicional al ritual. No importa si se trata de una agenda, cuaderno o libreta. Lo importante es que te guste y te den ganas de agarrarla para planificar. Si es papelería-guía sería mucho mejor, quiero decir, papelería exclusiva de planificación que te oriente (hacé click acá para comprar tu agenda mentora 2020, quedan las últimas en stock!), pero en caso de no tenerla, cualquier cuaderno o libreta que quieras estará bien.
4. Acompañar el momento con algo rico para tomar y comer: un café, un té o unos mates con algo que te guste para acompañar. Este es el enganche final, se trata de un momento por y para vos. Solo tenes que sentarte a pensar, y con papel en mano ponerte a organizar tu semana. Disfrutalo con algo rico.
5. Eliminar distracciones y crear un ambiente relajado: luego de tener todo lo anterior a punto, es momento de relajar y empezar. Si podés, poné el celu en modo avión o bajale el volumen, recordá que son solo unos minutos y durante este tiempo tu energía debe estar puesta en esto. Podes poner música suave de fondo, para crear ambiente. Y por supuesto, evitar las visitas que para este momento, no necesitamos.
   

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DISFRUTÁ DE ESTE RITUAL POR COMPLETO: DESDE QUE EMPIEZA HASTA QUE TERMINA. CADA DETALLE ES PARA VOS. DESDE QUE EMPEZÁS A DESPEJAR LA MESA Y COMENZÁS A PONERTE CÓMODA, HASTA CUANDO TE VAS PREPARANDO ESE CAFÉ MIENTRAS BUSCAS ALGO DE MÚSICA PARA PONER DE FONDO.

CUANDO TERMINES DE PLANIFICAR, CONCLUÍ CELEBRÁNDOTE DE LA MANERA QUE MÁS TE GUSTE POR HABER PUESTO EN ORDEN TU SEMANA. QUE HABERLO HECHO TAMBIÉN ES UN LOGRO, Y POR MÁS PEQUEÑO QUE LO VEAS, SE FESTEJA. NO LO DUDES, CELEBRATE!

Algunos de estos consejos pueden resultarte algo obvios, pero con esto quiero que repases y tomes conciencia de todo lo que necesitas para poder hacer de tu planificación semanal un ritual del que disfrutes y vuelvas propio, para esperar ansiosa el momento de que llegue.

Espero que puedas aplicar estos consejos! Y si querés, dejame un comentario debajo contándome si ya tenés tu propio ritual y de qué se trata! Te leo!

Besos, Naty