4 prácticas para mejor tu capacidad de concentración en todas las tareas que hagas

Este ejercicio puede servirte para cualquier cosa que hagas que requiera de tu atención. Si sentís que te distraes fácil (cuidado que distraerse es normal cuando no estamos cumpliendo reglas básicas que te voy a compartir ahora), estoy segura de que estos consejos te pueden venir muy bien.

A mi me pasaba que me distraía muy fácil con el teléfono, en diferentes situaciones. Mientras hacia las tostadas de la merienda, se me quemaban. Mientras trabajaba, llevaba un mensaje y era una buena excusa para frenar, y lo que eran 5 minutos terminaban siendo 20 en las redes sociales. Esto es real. Un día dije basta, me di cuenta que de esa forma las cosas no me estaban saliendo como quería. Distraerse con el teléfono es muy fácil, cuando estamos trabajando más todavía, porque es como una invitación al recreo. Por eso, hoy quiero compartir con vos estas ideas que me han ayudado muchísimo a mejorar mi atención y a no caer en la tentación de la distracción cuando necesito concentrarme en algo.

Práctica #1. Definir los descansos. Para mi esto fue el mayor logro. Definir mis momentos de descanso y cuando “cortar” me permitió ser más ordenada. Definir las pausas cuando estamos haciendo algo que requiere de mucha concentración es fundamental, no solo para evitar distracciones sino para rendir más. Al saber cuándo es nuestro recreo, las distracciones son menos tentadoras. Al saber cuándo es momento de terminar o cortar con algo que estamos haciendo, nos evita pasarnos horas haciendo lo mismo, que a larga termina agotando nuestra energía y te aseguro, terminamos rindiendo mucho menos.

Práctica #2. Evitar la multitarea. Hay un posteo sobre esto específicamente que quizás te pueda servir, te lo dejo acá por si querés leerlo (el dia que deje de hacer dos cosas al mismo tiempo). Ser conscientes de que no podemos hacer dos cosas al mismo tiempo nos ayuda a no desconcentrarnos: mi lema es “hago una cosa, después otra”. De a una, dos al mismo tiempo no. Saltando de una cosa en otra, tampoco. Cuando me veo tentada a distraerme con otra actividad, me pregunto: ¿qué estoy haciendo ahora? entonces termino con esto y después sigo con lo que viene. Distracciones fuera.  ¿Suena el celular? Distracción! Lo reconozco como tal y ni lo miro.

Práctica #3. Las cosas en orden. Si hay que me distrae mucho es el desorden. Si me pongo a trabajar en casa y tengo el escritorio desordenado,  eso algo que sé que me va a distraer después, no porque me ponga a ordenarlo, sino porque me voy a distraer “corriendo cosas” en algún momento y eso me va a desconcentrar de lo que esté haciendo en ese momento. U escritorio ordenado y despejado para mi es fundamental. Un bacha sin platos sucios para mi es importante para empezar a cocinar. Sino, me distraigo. Fácil. Soy así de simple.

Práctica #4.  Tareas con prioridad. Todas las tareas de mi lista no son importantes, ni urgentes, ni requieren de la misma atención. Para mi el orden en mis tareas y qué haré primero es fundamental para definir con qué empezar y con qué continuar. Acá te dejo una guía que te puede ayudar a definir esto (guía gratis como lograr grandes cosas). Tener definido lo que tengo que hacer me permite no saltar de tarea en tarea. Saber cuándo tengo que hacer cada cosa, también. Para esto último, te doy un ejemplo, sé que a las 18hs tengo que cortar con lo que esté haciendo porque es momento de hacer la merienda. A las 18hs esa es mi prioridad, no otra. Aprender a respetar esto me ayudó a organizarme mejor y a no entrar en conflicto con el resto de la familia.

Espero que estas prácticas te ayuden a mejorar si así lo necesitas!

Beso grande, Naty