4 ideas para superar la relación de amor-odio que tenés con tu lista de tareas

Si tu lista de cosas por hacer es larga, seguro tiene cosas de las más variadas. Por eso estoy 100% segura de que no todo lo que está en tu lista es prioritario ni urgente. Es más, si te ponés a mirarla es muy probable que no todo lo que esté en tu lista sea realmente importante.

Las listas son inventarios, y si no sabemos gestionarlas bien pueden llevarnos a la deriva. Una pequeña pero profunda obsesión por tachar tareas nos puede terminar desviando mucho del camino.

Las listas nos pueden llevar de acá para allá, por diferentes lados, porque las cosas en ella están mezcladas. Por eso quiero compartir con vos estos puntos, para ayudarte con este tema que estoy segura que de alguna manera te preocupa.

Agarrá tu lista de tareas y empecemos:

#1. Preguntate: ¿lo primero de mi lista es lo más importante? O resulta que está ahí, primero, porque fue lo primero que se te vino a la mente cuando armaste la lista?

#2. No caigas en la trampa o tentación de ir tachando en orden. Preguntate: ¿qué es lo más importante de lo que tengo acá escrito? Y luego, ¿qué es lo segundo más importante?. Poné esa actividad crucial siempre primero en tu lista de prioridades.

#3. Aprendé a decir no.  Decir no a todo aquello que no esté relacionado con tu tarea más importante en ese ámbito de tu vida.

#4. No pierdas de vista tu propósito ni tus objetivos, que sea eso lo que te marque el rumbo y no el orden que le diste a la lista cuando la escribiste.

Si simplificás y dejás que eso más importante dirija tus pasos, evitarás el simple hecho de estar ocupada y tus horas te rendirán mucho más.

Espero que esto te haya inspirado para que superes esa relación de amor-odio que tenés con tus listas de tareas y te ayude a usar la herramienta de una mejor forma!

PD: te dejo un archivo para que empieces hoy a hacer tu lista de tareas, una que ames y te sirva de verdad! Acá podés descargarla.

Besos,

Naty